TENGO UNA MISIÓN IMPORTANTE
Las clases de canto NO son exclusivas de los "talentosos".
Seguramente tú también has escuchado que para cantar "se nace con el DON".
O tal vez personas que tú consideras importantes te han dicho que no tienes lo necesario, llevándote a dejar de intentarlo, o a resignarte a ser una persona con "voz fea" y limitarte a cantar a escondidas, o peor aún, a no hacerlo por miedo a las críticas y burlas de las personas que te importan o de todo el mundo.
Sí, a mí también me pasó. El día que yo quise aprender a cantar me enfrenté a familiares y peor aún, MAESTROS que me bajaron de mi nube y me dijeron que yo no había nacido con la suerte de tener el DON.
Y sí lo creí por mucho tiempo. Sin embargo pasaron muchas cosas que me llevaron a estudiar seriamente el fenómeno de tener o no el famoso don, y descubrí que todo esto son mitos que se han regado por generaciones enteras y ahora todo el mundo cree, incluso muchos profesores. Este efecto se llama WOOZLE, y gracias a él existen muchas mentiras que todo el mundo cree y da hechos por verdaderos. Como el creer que rezar nos va a resolver los problemas y que si no se resuelven es que lo estamos haciendo mal (espero no faltar el respeto a nadie, pero es bien sabido que los milagros son conocidos por ser algo que le sucede a pocas personas, si lo piensan bien el canto es así: los que cantan sin estudiar son vistos como "milagros"). Lo planteo así de mal porque el canto está lleno de estas explicaciones "verdaderas" que no tienen una comprobación científica.
El Canto, las formas de aprenderlo y muchas cosas relacionadas a él son parte de estas mentiras. Te dejo un par de links que te hablan de este efecto:
¿Se puede demostrar que cualquiera puede?
Es una pregunta interesante, porque vamos a encontrar personas que tengan muchas razones para decir que no se puede, pero vamos a seguir comparándolo con los milagros:
Suceden, claro que sí. Son cosas inexplicables que nos maravillan, igual que algunos cantantes que afirman no haber estudiado jamás. Qué bueno que existen, pero... ¿qué pasa con el resto de nosotros? ¿Los que no tenemos un "milagro" en la mano, los que deseamos poder cantar pero no contamos con esa "bendición"?
Supongamos que tenemos dos personas que no tienen trabajo. Ambas en su casa oran fervientemente para lograr conseguir uno...
Sucede que la primer persona recibe una llamada donde le ofrecen un empleo. No hizo nada más que orar y esperar, obtuvo el milagro. Podemos pensar que sus oraciones fueron escuchadas, o tal vez en algún momento de su vida le dio su teléfono a alguien y casualmente llegó al lugar indicado. Alguien marcó ese número y el objetivo se logra. En realidad es algo que se estuvo gestando sin el conocimiento de la persona uno, pero que rindió frutos sin que tuviera que hacer nada más.
No vamos a polemizar contra los milagros, este suceso tuvo explicación, aunque la persona lo haya atribuido a sus oraciones, pasaron cosas de las que no se enteró y gracias a eso obtuvo el trabajo. Hay sucesos que no la tienen, o al menos no la han encontrado. Pero eso es tema para otra ocasión. En fin.
La persona número dos siguió orando, pero nadie le ofreció ningún trabajo o recibió ninguna llamada. Esta persona decidió tomar acción y salir a tocar puertas. Hizo llamadas, asistió a entrevistas, elaboró su CV y lo llevó a muchas empresas.
Podemos complicar la situación diciendo que pasó mucho tiempo antes de que alguien le ofreciera un trabajo, pero lo importante es que esta persona se esforzó, y mucho. Al final también consiguió un buen empleo.
En el Canto podemos situarnos en posiciones similares, teniendo personas que no necesitan esforzarse, simplemente lo hacen y ya (y esto sí tiene explicación en la gran mayoría de los casos), y las personas que necesitan tomar una decisión y buscar por su cuenta las circunstancias que les den los resultados deseados.
Pero nos resulta fácil atribuirlo a cuestiones "divinas".
¿te hace algún sentido todo esto?
Me he propuesto aportar al mundo de la voz un grano de arena que aumente por mucho las posibilidades de aprender en personas que aparentemente no tienen lo necesario para lograr el objetivo de CANTAR.
No me gusta dar respuestas ambiguas o sin opciones tangibles.
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Me dijeron que no aprendería a cantar si no dominaba mi diafragma, pero no me enseñaron a hacerlo.
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Después de muchos intentos con explicaciones muy confusas mi voz no tuvo un cambio y el profesor terminó por decirme que no lo iba a conseguir por no entender lo que me pedía (imaginar un huevo dentro de mi boca no me dejaba ni hablar).
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El miedo a volver a escuchar que no sirvo de boca de un "experto" me llevó a no volver a buscar clases.
Esto y muchas cosas más estoy segura que muchas personas lo han vivido.
Mi misión consiste en ayudarles a entender su voz, el por qué no hay cambios y a reconciliarse con sus miedos. Siempre con respuestas comprobables y ampliando los caminos que tienen por delante.
OJO: No estoy prometiendo que van a cantar mágicamente (a veces sí pasa). Estoy prometiendo que si estás dispuesto (a), vas a abrir muchas puertas. El cruzarlas sí es decisión tuya. ¿Te animas?